Los orígenes de los apellidos

Nuestros apellidos actuales provienen de muchos siglos atrás, incluso antes de la creación de los registros parroquiales a partir del Concilio de Trento. Tan sólo hay que recordar que los romanos ya otorgaban un “nomen” y un “praenomen” a sus hijos. Por tanto, el invento no es nuevo, ahora bien, veamos qué circunstancias marcan los orígenes de los apellidos.

Los orígenes de los apellidos

Orígenes

Aproximadamente en el siglo X empiezan a configurarse las bases sobre las que se asentarán nuestros apellidos actuales en un proceso que durará unos cuantos siglos. Así pues, ¿quién no se ha preguntado en algún momento por qué motivo tiene un determinado apellido y de dónde procede? La pregunta se amplía cuando se investigan los antepasados ya que en cada generación se descubren nuevos apellidos. Ahora bien, el origen de cada apellido es otra historia y está relacionado con diferentes factores, pudiendo dividirlos en varios tipos de apellidos:

Profesiones y adjetivos

Tal vez el más relevante es el referente al oficio familiar: Zapatero, Herrero, Pastor, Ballesteros, etc. Otros proceden de los motes, habilidad tan nuestra que puede marcar a una familia si el mote en cuestión puede resultar un tanto ofensivo por tratarse de defectos, como Gordo o Cabezón. Aunque también los mismos motes pueden deberse a una cualidad: Cortés, Leal o Alegre, por ejemplo.

Patronímicos (en relación al padre)

Los apellidos de origen patronímico están muy extendidos y se encuentran no sólo en España sino en otros países. Son aquellos que deben su origen a un nombre propio y que añaden “-ez” al final, es decir, “hijo de”. Por ejemplo, Martínez es el hijo de Martín, López es el de Lope, etc. Esta situación se repite en otros lugares como en Inglaterra: “son” significa “hijo” en inglés y no es extraño encontrar el apellido Johnson o Wilson, es decir, el hijo de John o de Will.

Toponímicos (en relación a un lugar)

En otros casos se trata de apellidos toponímicos, o lo que es lo mismo, aquellos que indican el lugar de procedencia o residencia. Dentro de este grupo se incluyen, además, los que indican accidentes geográficos o poblaciones y, en algunos casos, con la preposición “de” por delante, aunque esta se ha perdido en la mayoría de los casos. Así, el abanico de apellidos es enorme: Madrid, Jerez, Hoyos, Lago, Puig, Montes, etc.

Religiosos

Los apellidos compuestos como San José o Santa María tienen un origen interesante. En algunos casos se deben a los procesos de la Inquisición, cuando los nuevos cristianos conversos debían cambiar su apellido por otro cristiano. Pero, además, también se encuentra en los niños abandonados en las inclusas de las ciudades o en las iglesias. En ocasiones estos bebés eran bautizados con el nombre del santo según el día que llegaron al orfanato o bien del patrón o patrona del lugar.

Curiosidades

Como caso curioso encontramos el apellido Roselló, en el que probablemente, y a falta de investigaciones más profundas, se localicen muchos de estos aspectos, incluido el misterioso. Se trata de un apellido con un origen confuso y por investigar. En principio se podría pensar en un apellido de origen toponímico situándose en la región francesa del Rosellón. La historia se complica cuando este apellido en su rama valenciana y en el mismo registro parroquial aparece indistintamente como Roselló, Sarasate o Sasolas. Y además en diferentes grafías: Zarazate, Zalazate, Çaraçate o Çaçolas. Según algunos expertos, el apellido Sasolas, originario del País Vasco, probablemente sea derivado de Sasiola o Sarasola, mientras que Sarasate sea un apellido de origen navarro, tal vez toponímico.

Durante el siglo XVII los sacerdotes empezaron a anotar en los márgenes de manera indistinta “alias Roselló” o “alias Zalazate” y en cualquiera de las formas anteriores para indicar el nacimiento o matrimonio de algún miembro de la familia. Durante ese siglo se impuso definitivamente el apellido Roselló. Tal vez, al confirmar este apellido como el definitivo los miembros de la familia Roselló estuvieran intentando borrar las huellas de algún proceso relacionado con la Inquisición y que estaría ligado a las anteriores formas de nombrarlos y a sus raíces familiares.

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3 comentarios en «Los orígenes de los apellidos»

  1. En cuanto a los apellidos procedentes de motes conozco algunos curiosos como Bracicorto o Piernavieja, que aún hoy perduran.

    Podríamos añadir como apellidos también los que aluden a lugares de procedencia, coincidiendo el apellido con nombres de Pueblos o ciudades.

    Y luego también los alusivos a la naturaleza, como Valle,Pino, Carrasco, Rio,… En alguna ocasión alguien me comentó que este último tipo de apellidos podría proceder de judios conversos, pero no tengo datos para asegurarlo.

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